Nuevo tratamiento farmacológico para regenerar las células ciliares del oído interno

La posibilidad de que se disponga de un tratamiento que permita regenerar las células ciliares del oído interno es una buena noticia, tanto para las personas que han perdido audición como para los que tienen acúfenos. De momento se trata de un estudio realizado en el laboratorio, y ahora será preciso continuar con un estudio a realizar con humanos, y a esperar que los resultados sean satisfactorios y que puedan ser aplicados.

No podemos ocultar que el plazo para que este descubrimiento se transforme en un tratamiento aplicable en clínica será de dos años en el mejor de los casos. Las personas con acúfenos o las que han perdido audición desearían que el tratamiento estuviera disponible hoy mismo, pero la aplicación clínica de estos tratamientos requiere su tiempo y la demora hasta su aplicación es inevitable.

En el oído interno, disponemos de miles de células ciliares cuya función es detectar las ondas sonoras y transformarlas en señales nerviosas que llegan al cerebro a través del nervio acústico, lo que nos permite oír e identificar conversaciones, música y todos los sonidos cotidianos. La exposición excesiva y continuada al ruido, el envejecimiento y algunos fármacos denominados ototóxicos pueden dañar y causar la muerte de parte de las células ciliares. En algunos animales, estas células se regeneran pero no ocurre así en los humanos. Cada humano nace con unas 15.000 células ciliares en cada uno de los oídos, y una vez dañadas ya no pueden regenerarse como sucede en otras células del cuerpo humano. La muerte de estas células es la causa de la pérdida de audición, que en muchos casos lleva aparejada la aparición de acúfenos.

Por lo anterior, constituye una buena noticia que investigaciones llevadas a cabo en el MIT Instituto Tecnológico de Massacchusetts y en el BWH Hospital de Boston, hayan descubierto una combinación de fármacos que amplía la población de células madre en el oído induciendo a algunas de estas células a transformarse en células ciliares, lo que podría ser que se disponga de una nueva forma de tratar la pérdida auditiva y los acúfenos. Este tratamiento se realizaría por inyección del fármaco en el oído medio, desde el cual a través de la membrana que los separa se difundiría al oído interno. Este mecanismo de inyección se usa de forma habitual para inyectar fármacos con los que tratar infecciones del oído.

Algunos investigadores que participaron en la investigación han recibido una licencia del MIT/BWH y han constituido una compañía que tiene previsto iniciar los estudios en humanos en un plazo de 12 a 15 meses.