Estrés y Tinnitus

ESTRÉS Y TINNITUS

El tinnitus es uno de los trastornos más comunes en la población, estimándose que el 10 % tiene un tinnitus persistente, aunque la mayor parte de ellos conviven con el tinnitus sin que afecte a su calidad de vida y sin necesidad de buscar ayuda médica. Una parte de los afectados, cuyo porcentaje es desconocido por no existir estadísticas fiables, a los que el tinnitus reduce su calidad de vida se ven obligados a buscar ayuda médica. Entre las personas afectadas, tanto el tipo como la intensidad del tinnitus varía de una persona a otra. Una explicación que podría justificar estas diferencias de una persona a otra en cuanto a los efectos del tinnitus, podría ser el nivel de estrés al que están sometidos. Si el nivel de estrés es elevado, es más probable que el efecto del tinnitus sea elevado.

El estrés es experimentado alguna vez en la vida por todos los humanos. Se produce cuando las demandas de todo orden recibidas por la persona no pueden ser atendidas por sus recursos, es decir, por sus capacidades biológicas, psicológicas o sociales. Suele aparecer cuando las demandas son muy elevadas, es decir cuando la persona tiene muchas actividades que atender, aunque también puede aparecer cuando la persona no tiene obligaciones para ocupar su tiempo y se siente ociosa por ello.

Contrariamente a la creencia popular, el estrés no es siempre prejudicial para la salud. Un poco de estrés y de excitación puede ser positivo para que la persona se focalice en la actividad que realiza. El efecto de las hormonas del estrés puede ayudar a la persona en algunas ocasiones, por ejemplo afrontar una situación difícil o buscar un lugar seguro. Por ello, en el corto plazo, el estrés puede ser necesario para un buen funcionamiento de la persona, pero a largo plazo un estrés prolongado puede ser muy incómodo tanto para el cuerpo como para la mente.

¿Cómo reconocer los síntomas de estrés? Los síntomas del estrés varían ampliamente de una persona a otra, pero hay algunos síntomas frecuentes que se pueden observar, que afectan tanto al cuerpo como al pensamiento y al comportamiento.

Los signos de estrés en el cuerpo son:

  • Sensación de sentirse tenso.
  • Latidos del corazón acelerados.
  • Dificultades o cambios en la respiración.
  • Sensación de peso en el estómago, náuseas.
  • Exudación abundante.
  • Necesidad de ir al lavabo con frecuencia.
  • Dificultades de concentración
  • Sueño alterado.

Signos de estrés en sus pensamientos

Si la persona cree que debe hacer frente a una situación difícil, si teme que algo irá mal o si piensa que algo malo ya está sucediendo, y tiene la sensación de que la situación será muy difícil, demasiado para hacerle frente, puede que sus pensamientos sean:

  • No podré afrontar esta situación o este problema.
  • Nunca podré recuperarme para estar como antes.

También es probable que los pensamientos se focalicen excesivamente en el motivo estresante, hasta el punto de que sea difícil concentrarse en otras cosas. El resultado de todo ello es que el problema parece ser más importante de lo que realmente es. Este proceso es conocido como “atención selectiva”

Signos de estrés en el comportamiento

  • Dejando de realizar las cosas que le gustaban: ver amigos, practicar hobbies, leer o realizar ejercicio físico.
  • Haciendo algunas cosas para tratar de manejar el estrés, como tomar alcohol, fumar más de lo habitual, quedarse en la cama, o buscar distracciones no habituales (largos períodos en internet o viendo TV).

Con el tiempo, estas acciones pueden mantener el sentimiento de estrés, e incluso pueden ser problemas por sí mismas (alcohol, tabaco, etc.). El sentimiento de estrés también puede conducir al mal humor o al abatimiento.

Muchos factores pueden contribuir al estrés, incluyendo situaciones habituales, pensamientos y actitudes. Un camino para comprender como los factores que contribuyen al estrés están relacionados entre sí, es la práctica de una terapia cognitivo-comportamental (TCC), la cual puede ayudar a entender por qué se experimenta el estrés, porqué se mantiene, y que acciones pueden ayudar a reducirlo o a eliminarlo.

La TCC sugiere estudiar cuando el paciente siente que es triste, pesimista o estresado, si estos sentimientos están influenciados fuertemente por sus propios pensamientos. No es lo que le sucede lo que hace que la persona se sienta estresada, sino la que piensa sobre lo que le sucede.

Por ejemplo, imagine que es de noche y está durmiendo, y de pronto se despierta debido a que ha oído un ruido. Puede pensar: alguien ha entrado en mi casa, y sentirse muy asustado. Alternativamente, podría haber pensado: es el gato que ha entrado en casa, y sentirse aliviado. La TCC se propone explicar que lo que la persona siente está fuertemente determinado por sus pensamientos sobre una determinada situación o un hecho, más que por la propia situación.

El estrés tiene un impacto importante en el comportamiento de la persona estresada. Por ejemplo, con objeto de controlar el estrés, la persona puede retrasar o incluso evitar situaciones potencialmente estresantes, lo que puede ayudar en el corto plazo, pero a largo plazo puede conducir a más estrés, instalándose en un ciclo vicioso de estrés.

Relación entre estrés y tinnitus

La forma como los afectados responde al tinnitus varia muchísimo de una persona a otra. Para unos el tinnitus se considera al mayor estrés en su vida, y para otros se trata de una sensación neutra. Podría suponerse que esta diferencia es debida a que cada persona tiene su propio tinnitus, distinto del de otras personas. Esto tiene sentido, pero la evidencia deducida de la investigación sobre el tinnitus no confirma esta idea, y en su lugar sugiere que la razón por la que una persona está estresada y otra no lo está se debe a que tienen distintas ideas o creencias sobre el tinnitus.

Las personas estresadas por causa de su tinnitus tienden a pensar sobre ello en pensamientos que reflejan desesperación, falta de esperanza, pérdida de la alegría de vivir, creencia de que nunca alcanzarán paz y quietud, y asimismo que son incomprendidos por los demás. Se sienten resentidos por la persistencia del tinnitus, desearían escapar de esta situación, y se quejan de la falta de atención de las instituciones sanitarias a los afectados por tinnitus. Cuando los pensamientos tienen lugar en estos términos, el tinnitus puede estar aso-ciado a un gran nivel de estrés.

Además del estrés, otros factores emocionales y físicos se han asociado al tinnitus. Aunque no se puede afirmar que siempre sea el estrés el causante del tinnitus, o bien que se trata simplemente de un factor que contribuye a la aparición del tinnitus, en muchos casos el tinnitus ha aparecido en momentos de elevado estrés. También es común que en personas con tinnitus, en períodos de estrés la percepción del tinnitus sea más intensa. Como ya hemos dicho, la situación estresante que puedan sufrir personas con tinnitus, puede conducirles a un círculo vicioso; más estrés más tinnitus, y más tinnitus más estrés.

Atención y habituación

Para entender la relación entre el tinnitus y el estrés hay que considerar el papel de la atención. Cada minuto de cada día recibimos muchísimas informaciones de nuestro entorno, sean visuales, sonoras, táctiles, olfativas, etc., y es imposible poner atención a toda esta información que recibimos simultáneamente. Por fortuna, tenemos un sistema que nos permite seleccionar lo que vamos a atender en un determinado momento. Las restantes informaciones que son repetitivas y de escasa interés no son tenidas en cuenta. Por ejemplo, si nos fijamos en el tic-tac del reloj, normalmente no reaccionaremos ante el sonido que percibimos a menos que, conscientemente, le prestemos atención. Es decir, estaremos habituados a dicho sonido. Sin embargo, si la información nos produce estrés tendremos dificultades para ignorarla o para habituarnos a ella. De hecho, si la información es emocionalmente importante y la persona está en alerta entonces ocurrirá exactamente lo contrario de la habituación, y esto es muy importante en el caso del tinnitus. Si la persona ve al tinnitus como una agresión a su bienestar su atención se focalizará en él, y en tal caso lo escuchará atenta-mente, y al focalizar su atención en el tinnitus le parecerá que es más pesado y más intrusivo.

Estos cambios en la atención pueden explicar la causa de que el tinnitus pueda aparecer o empeorar en períodos de estrés. También puede explicar por qué una mayoría de personas con tinnitus son capaces de percibir los ruidos sin que les afecten.

Como manejar el estrés propio del tinnitus

Haciendo cambios en una o en varias áreas de su modelo de comportamiento cognitivo la persona puede ayudar a reducir sensaciones desagradables, tales como el adverso efecto del estrés, aunque esté asociado al tinnitus o a otros problemas de su vida.

Pensamientos

Los pensamientos son extraordinariamente importantes por su influencia en los sentimientos. Por ello, puede ser efectivo prestar más atención a los pensamientos y analizar si le ayudan o lo contrario. La persona debe tratar de realizar las acciones que siguen para desterrar los pensamientos que son negativos para el tinnitus.

  1. Observar en qué situaciones o en qué tiempos se siente especialmente estresado por el tinnitus.
  2. Pregúntese qué pensamientos aparecen a su mente en estas ocasiones, y escríbalo. No lo analice, simplemente escríbalo como han llegado a su mente.
  3. Para evaluar estos pensamientos, debe hacerse las preguntas siguientes:

¿En que se basa para creer que su pensamiento es cierto?

¿Cuáles son las evidencias que apoyan su creencia en relación al pensamiento?

¿Si tiene alguna información que le confirme que este pensamiento no es cierto, cuál es la evidencia que usted tiene en contra de su pensamiento?

¿Cuál es la peor cosa que podría sucederle?

¿Si un amigo le pidiera ayuda en relación al mismo problema, qué le diría?

¿En relación al mismo problema, qué le diría un amigo suyo?

Haciéndose las preguntas anteriores, la persona puede ser capaz de formularse más cuestiones que le ayuden a afrontar su tinnitus. Por ejemplo, recordándole que el tinnitus no es un peligro y que es posible disfrutar de la vida a pesar del tinnitus. Modificando los mensajes que la propia persona afectada se ha generado en relación al tinnitus, puede ayudar a reducir su impacto en su vida.

Reacciones físicas

La relajación puede utilizarse como una herramienta para afrontar las reacciones físicas asociadas al estrés. Puede hacerse de muchas y muy variadas técnicas. Desde quedarse sentado un tiempo sin hacer nada, forma en la que muchas personas encuentran relajación, hasta realizar ejercicios físicos. Recomendamos utilizar el

DVD publicado por nuestra asociación Respiración diafragmática. Relajación progresiva, enviado en su momento a todos los socios y disponible para quien lo desee.

No deben depositarse esperanzas en que la relajación pueda dar lugar a que el tinnitus desaparezca, pero ayudará a soportarlo.

Algunas personas realizan cambios en su comportamiento lo que les ayuda a manejar mejor su tinnitus, por ejemplo, focalizar su atención en actividades que les interesen micho más que en su tinnitus. Véanse algunas ideas que pueden ser efectivas para manejar el tinnitus:

Realizar ejercicio físico de acuerdo con su capacidad para realizarlo.

Pasando tiempo en actividades agradables y en relaciones sociales.

Resolviendo problemas y cambiando cosas de su vida que causan estrés, si ello es posible.

Hablando con personas que le comprendan, sean amigos o familiares, o buscando el consejo de un psicólogo.