Trastornos auditivos debidos a la exposición continuada a ambientes ruidosos

Está aceptado por los especialistas que la exposición continuada a ruidos de elevada intensidad (obreros metalúrgicos y de la construcción, músicos, militares en acción, habituales de discotecas, etc.) es una causa de traumatismo acústico que puede originar pérdida de audición y acúfenos. Además, en personas que sufren acúfenos por otras causas, la exposición al ruido suele ser causa del empeoramiento de sus acúfenos.

Por el interés que esta información tiene para los que tenemos acúfenos, y por las advertencias relativas a los ruidos que soportan los niños y los jóvenes, transcribimos un artículo publicado en la revista Audiología en la que se insta a proteger los oídos de altos niveles sonoros.

Un estudio realizado por la firma Gaes pone de relieve el elevado nivel de ruido existente tanto en la calle como en los puestos de trabajo. Según dicho estudio uno de cada 4 españoles considera que su entorno laboral es ruidoso, y un 71% afirma que el ruido le dificulta la concentración en el trabajo.

Cerca de 9 millones de personas conviven en España a diario con niveles de ruido superiores a 65 decibelios, máximo recomendado por la OMS. Según los expertos, la concienciación es clave y empieza por tomar medidas a nivel individual. Si no podemos evitar convivir con niveles elevados de ruido, debemos tomar medidas para proteger nuestros oídos y prevenir una posible pérdida auditiva, afirma el Dr. Juan Royo, otorrinolaringólogo y responsable de la comunidad virtual Viviendo el sonido de Gaes.

Sin embargo, a pesar de estas recomendaciones, 9 de cada 10 españoles no se protege contra el ruido. El restante 10 % que se protege utiliza de manera habitual protectores auditivos para dormir con el objetivo de coger el sueño más rápido (38 %), para conseguir una mayor concentración para trabajar (25%) y para aislarse del ruido al estudiar (24%).

Más vale prevenir

Otras medidas de prevención que están al alcance de todos son moderar el tono de voz (el 77% considera que en nuestro país se habla demasiado alto) y utilizar un volumen adecuado cuando escuchamos música (un 25% no lo hace), vemos la televisión (el 15% no lo hace) o escuchamos la radio (un 12% no lo hace).

Los expertos alertan que desde pequeños estamos expuestos a niveles de ruido por encima de la recomendado. Una de las causas más frecuentes son los juguetes infantiles que emiten música o sonidos. Un 61% de los encuestados considera que emiten a un volumen demasiado alto. Los juguetes pueden llegar a ser muy ruidosos, incluso llegando a provocar lesiones irreversibles en la audición de los niños cuando se superan los 80 decibelios, alerta el Dr. Royo.

El estudio elaborado por Gaes revela que a un 34% de los españoles el ruido les afecta el estado de ánimo. Las obras en la calle (67%), las obras del vecino (49%), el tráfico (39%), la televisión y la música del vecino (16%) y el sonido de los fines de semana en la calle (6%) son los ruidos que más molestan a los españoles.

Por el contrario, los sonidos que más nos relajan son el sonido del mar (83%) y el sonido de la montaña (56%). Para 1 de cada 4, el mejor aliado es el silencio.

Exposición prolongada

Los expertos detectan una mayor pérdida auditiva a edades más tempranas. La pérdida de audición provocada por altos niveles sonoros se produce como consecuencia de una exposición prolongada al ruido. Cuanto más alto sea éste, más rápido se desarrollará el trastorno auditivo, que incluso puede ser irreversible, advierte el Dr. Royo.

Asimismo, se está observando en los últimos años que la pérdida auditiva asociada al envejecimiento, la llamada presbiacusia, aparece a edades más tempranas. Actualmente, entre el 40 y el 50% de la población española empieza a experimentar pérdida auditiva debido al envejecimiento alrededor de los 65 años, pero dentro de poco los expertos alertan que será las personas de 40 a 50 años las que presenten signos de presbiacusia. Si no se adoptan medidas de prevención, el ruido puede hacer que nuestros oídos envejezcan antes de tiempo.

A lo expuesto en esta información creemos oportuno aportar dos consideraciones: 1. La pérdida de audición o presbiacusia debido a la edad suele llevar consigo la aparición de acúfenos; y 2. Las medidas de prevención deben tomarse por las autoridades competentes, pero mientras no sean efectivas en su totalidad cada persona debe tomar sus propias medidas preventivas.