Tratamiento de los acúfenos, la hiperacusia y la misofonía mediante la terapia TRT (Tinnittus Retraining Therapy)

Nos consta que muchas personas afectadas por acúfenos conocen la existencia de una terapia conocida como TRT, que tiene como objetivo conseguir que el acúfeno deje de estar presente en el consciente del paciente, es decir, conseguir que el paciente deje de percibir constantemente su acúfeno, el cual se alojará en su inconsciente, y aunque pueda aparecer en su consciente lo hará de forma no aversiva.

Esta terapia, muy utilizada en Estados Unidos, ya que fue en Atlanta donde se inició, se utiliza cada vez con mayor frecuencia en Europa.

La terapia TRT consiste en el uso de generadores de sonido blanco (sonido que contiene todas las frecuencias perceptibles por el oído humano) en ambos oídos todos los días durante un período de tiempo variable de un paciente a otro, que debe ir acompañada de un asesoramiento terapéutico (counselling). En la revista APAT32 el lector interesado encontrará una amplia descripción del denominado counselling. En cuanto a la duración del tratamiento y al número de horas que se deben llevar los generadores, e incluso en qué intensidad se deben escuchar hay criterios muy distintos entre los profesionales. Parece que la duración del tratamiento oscila entre 12 y 18 meses, el número de horas diarias que deben utilizarse puede ir de 6 a las 24 horas del día, y en cuanto a la intensidad hay quien estima que debe ser levemente inferior a la del acúfeno, y quien estima exactamente lo contrario. Es evidente que se encuentra a faltar un protocolo de actuación aceptado por todos los profesionales como ocurre en el tratamiento de otras dolencias.

La asistencia del Dr. Pawel Jastreboff, padre de la TRT, al Congreso de Tinnitus Research Initiative celebrado el año pasado en Valencia, nos permite recoger sus explicaciones sobre la TRT, que transcribimos a continuación. Desafortunadamente no se dispone de un protocolo de actuación válido y fiable en el caso de la TRT como indica el Dr. Jastreboff en lo que sigue.

¿Qué piensa usted de la eficacia de la TRT después de 20 años de investigación sobre los acúfenos?
Dr. Jastreboff. Yo he visto más de 2.000 pacientes desde el año 1990, y mis resultados señalan que entre el 80 y el 90 % de los pacientes presentan una mejora estadísticamente significativa clínicamente comprobada. Pero mi opinión no es lo más importante: existen más de un centenar de publicaciones de equipos distintos del mío que demuestran la eficacia de la TRT en estudios realizados a lo largo de 3 ó de 5 años. Estos resultados a lo largo plazo son muy interesantes, demostrando que los beneficios de la aplicación de la terapia perduran al cabo de los años y que es posible observar mejoras notables.

¿Cuáles son los principales retos actuales de la TRT?
Dr. Jastreboff. El reto más importante es adaptar correctamente el counselling (asesoramiento terapéutico al paciente). El segundo reto es la mejora del aparellaje empleado en la generación del sonido blanco cuando se trata de pacientes con pérdida auditiva asociada al acufeno, lo que ocurre en el 70 % de los pacientes con acúfenos. Estos pacientes precisan materiales eficaces, como soluciones combinadas que asocien ayudas auditivas y generadores de sonido. El problema a resolver reside en el coste de estas soluciones, que constituye una barrera para gran número de pacientes.

¿Disponemos de un protocolo de actuación en casos de acúfenos, de hiperacusia o de misofonía?
Dr. Jastreboff. Este punto es muy importante para el tratamiento del paciente, no obstante está aún infravalorado. La disminución de la tolerancia sonora (DTS) que se define por la presencia de reacciones indeseables, sean de incomodidad, irritabilidad e incluso dolor, al exponerse a los ruidos de la vida cotidiana que no generan tales reacciones en las personas normales. La DTS puede aparecer aislada o acompañada de otros problemas como los acúfenos. Puede ser la consecuencia de una hiperacusia, de una misofonía (odio a los sonidos, conjunto de reacciones negativas muy intensas ante determinados sonidos), o de ambas. Nuestros resultados, que deben considerarse conjuntamente con los resultados expuestos en distintas publicaciones, indican que la DTS que debe ser tratada tiene una prevalencia de 15 pacientes de cada 1.000 personas de la población total y que está presente en el 60 % de las personas con acúfenos. El impacto de la DTS sobre la vida del paciente puede ser muy importante y agregarse al impacto de los acúfenos. Los pacientes evitan estar en ambientes ruidosos y la DTS limita su participación en muchas actividades de la vida cotidiana. Algunos señalan un dolor físico, una gran molestia y miedos, y desarrollan ansiedad y depresión. En los casos extremos la DTS toma, literalmente, el control de la vida del paciente. Al igual que los acúfenos, la hiperacusia y la misofonía pueden ser tratados con éxito por la TRT, pero se precisan protocolos específicos que, de momento, aún no tenemos. Para la misofonía se tratará de trabajar en la creación de asociaciones entre una variedad de sonidos y alguna cosa positiva para el paciente. Aunque la reacción de los pacientes a los sonidos sea similar de un paciente a otro, es fundamental realizar un diagnóstico correcto tanto en casos de acúfenos, hiperacusia o misofonía, ya que los mecanismos involucrados en cada uno de ellos son diferentes, como lo son igualmente sus tratamientos.