Pero hecho de menos la estabilidad que atrás tenía, la de estar en la calle y escuchar al 110%, tenía un oído absoluto, ahora tengo un oído promedio.
Bueno a lo que iba, hay días que estoy muy bien, otros que de repente me vuelve la patología y como si fuese el primer mes, así día sí y día no, y no, no es obsesión ni ansiedad ni nada, es REAL.
Como es real que cuando menos escucho sonidos y más en silencio estoy, más para atrás voy en cuanto a progreso de recuperación.
Acabo de volver del gimnasio, que es mi monasterio, mi sitio donde se me olvida siempre que ya no escucho como un prodigio, y me he puesto la música del coche a todo trapo, paso de todo, y sabéis qué? aquí en mi cuarto con el equipo retumbando la casa, y vuelvo a preguntar, sabéis qué? cuando más hago lo que hacía antes del trauma acústico, (con moderación claro como antes) más me olvido, paso del tema, y parece que de repente recupero todo y dejo atrás la moderada hiperacusia, hipoacusia, presión de oídos... Y ya acúfenos casi no tengo, ni en silencio, solo un recuerdo ínfimo del principio, pero es que es anecdótico que cuando más escucho música, más abro las ventanas del coche, más chillo y más sigo siendo el mismo de antes, más se me olvida y me siento mejor sin dolor ni esa asquerosa presión que es lo que más me ha jodido estos meses.
Vida solo hay una que recuerde consciente, y no me voy a amargar nunca por lo que pueda pasarme a nivel físico, sé que la fuerza mental cura, y que soy extraordinario y en un tiempo esto será otro recuerdo más.
Un saludo!
