ESTUDIO SOBRE LOS NIVELES DE VITAMINA D Y SU RELACIÓN CON EL TINNITUS

Autor: Salwa Mourad Abdelmawgoud Elsayed. 

Department of Otolaryngology, Faculty of Medicine, Sohag University, Egipto.

El objetivo el estudio fue evaluar los niveles de vitamina D en pacientes con tinnitus y determinar de forma subjetiva la eficacia de su suplementación en casos de deficiencia de dicha vitamina. Se reclutaron 35 adultos afectados por tinnitus bilateral con edades comprendidas entre 20 y 50 años. Todos ellos presentaban niveles auditivos normales en ambos oídos. Se determinaron los niveles de vitamina D de los pacientes, y los que presentaban deficiencia recibieron un suplemento durante 3 meses. Se utilizó el Tinnitus Handicap Inventory (THI) para establecer el grado de severidad de su tinnitus, tanto al inicio como al final del estudio, comparándose los resultados.

Treinta de los 35 participantes (85,71 %) presentaban deficiencia de vitamina D con respecto a los niveles considerados normales. Los resultados del THI al inicio del estudio mostraron que los pacientes tenían tinnitus con los grados de severidad en los niveles 3, 1, 2 y 4 por este orden con un promedio de 2,5, y ninguno tenía tinnitus del nivel 5. Al final del tratamiento los grados de severidad mostrados por el THI se encontraban en  los niveles 1, 2 y 3, y ningún paciente presentaba los niveles 4 y 5, con un promedio de 1,47. No se detectó correlación entre los resultados del THI con los niveles de vitamina D ni con la edad de los participantes ni con la antigüedad de sus tinnitus.

Conclusiones. La deficiencia de vitamina D es frecuente en personas con tinnitus. El resultado de la suplementación con vitamina D es prometedor en casos de tinnitus idiopático (de causa desconocida). Recomendamos determinar los niveles de vitamina D en personas con tinnitus y suplementar con dicha vitamina los casos con niveles deficientes.

Recurrimos a la Wikipedia para poder añadir a lo expuesto las informaciones siguientes. La vitamina D está representada por dos compuestos liposolubles: vitamina D3 producida en la piel del ser humano y de otros animales por acción los rayos UVB de la luz solar; y la vitamina D2 que se produce en las plantas, en los hongos y en las levaduras por la irradiación solar.

Las funciones de la vitamina D en el cuerpo humano pueden agruparse como sigue:

  • Su función en el metabolismo del calcio y del fósforo para la integridad de huesos y dientes: en la absorción intestinal de calcio y parcialmente de fósforo, la reabsorción renal de calcio y fósforo, el recambio mineral óseo y la homeostasis de calcio y fósforo, esto último junto con las hormonas paratiroidea y calcitonina.
  • Sus funciones en tejidos no calcificados.
  • La que ocurre en tejidos diferentes a aquellos relacionados con la homeostasis de calcio (células beta pancreáticas, capa de Malpighi de la piel, células cerebrales específicas, pituitaria, músculo, glándula mamaria, células endocrinas del estómago, etcétera). Por eso se ha demostrado que tiene un papel importante en la regulación inmune, en la función endocrina del páncreas, en la piel, en la función muscular y en el desarrollo cerebral.
  • Por medio de estas funciones se han observado ciertos efectos benéficos del consumo de vitamina D para la prevención o atenuación de algunas enfermedades como artritis reumatoidea, esclerosis múltiple, diabetes tipo 1, enfermedades inflamatorias de la piel, enfermedad inflamatoria intestinal (colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn), diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y en ciertos tipos de cáncer (por ejemplo, cáncer de colon, de próstata, colorectal, de mama).

Debido a estas múltiples funciones muy importantes para la salud humana y al bajo consumo de alimentos ricos en vitamina D (pescados grasos como el salmón o el atún, hígado de ternera, yema de huevo y hongos) se debe promover la suplementación y/o la exposición cuidadosa o prudente a la luz solar (por los riesgos o daños que ocasiona la sobreexposición al Sol).

Nota. Vemos que entre los efectos benéficos de la vitamina D en la prevención o atenuación de algunas enfermedades ni se nombra al tinnitus, o sea que los que venden vitamina D no nos tienen en cuenta.

CABALLA DEL ATLÁNTICO

Alimentos ricos en vitamina D, ordenados según su contenido de la vitamina:

Aceite de hígado de bacalao.

Bonito, arenque, atún y langostinos frescos.

Caballa del Atlántico fresca.

Boquerón, sardina y salmón frescos.

Champiñones expuestos 30 minutos al sol.

Queso manchego viejo.

Conservas de atún, caballa y sardinas en aceite.

Hígado de pollo.

Leche, mantequilla y yogur no enriquecidos.

Recomendamos a nuestros lectores que si sospechan que su nivel de vitamina D es insuficiente consulten con su médico, el cual una vez realizado un análisis en el que se determinará el nivel de dicha vitamina, podrá aconsejar si el paciente debe tomar suplementos de vitamina D. Tomar suplementos vitamínicos sin el consejo del médico es una forma de automedicación que no debe hacerse.