Más información sobre el fármaco acamprosato

En el número 38 de nuestra revista publicamos una amplia información sobre el fármaco acamprosato y su aplicación al tratamiento de los acúfenos. Se trata de un fármaco utilizado en el tratamiento de deshabituación al alcohol que se ha utilizado con éxito en el tratamiento de los acúfenos. Alejandra C., residente en Huesca, nos envió una información sobre el tratamiento seguido que transcribimos en Apat 38. Había sabido que este fármaco se había utilizado en Chile, y sus resultados publicados en la Revista Chilena de Otorrinolaringología por el Dr. Alejandro Peña Martínez, con el que pudimos contactar y nos informó sobre los tratamientos realizados que se describieron en Apat 38. Posteriormente, Merry de Bilbao nos envió una información que publicamos en Apat 40 relativa a un estudio que muestra resultados esperanzadores en el tratamiento de los acúfenos con acamprosato.

Hace unos días hemos recibido una información de nuestro socio Pablo A. que reside en Valladolid, que, textualmente, dice así: Hola, soy Pablo A. y quisiera decirles que estoy tomando el acamprosato, tomo dos pastillas cada 12 horas. He notado algo de mejoría, el ruido lo tenia en la cabeza, ahora esta más despejada, como si el ruido se hubiera bajado a los oídos, de momento lo soporto mejor. Un saludo. Pablo A.

Nos hemos puesto en contacto con Pablo para ampliar la información, y nos ha explicado que las pastillas que toma son de 333 mg., que lleva un mes y medio tomándolas, que el fármaco se lo ha prescrito su médico, y que forma parte de los fármacos atendidos por la Seguridad Social, en su caso la de Castilla y León. En el supuesto de que el fármaco fuera a cargo del paciente nos informa que la caja con 84 pastillas cuesta 28,60 € en la farmacia. El acúfeno en mi vida Fue una noche en el año 2000, tenía sólo 25 años cuando me despertó de pronto una sensación extraña: no podía controlar mi cuerpo, mi equilibrio no respondía y el miedo se apoderó de mí. Me incorporé en la cama y todo me daba vueltas. Me llevaron a urgencias y allí me hicieron unas preguntas rutinarias y me enviaron de vuelta a casa. Unos días más tarde, en el trabajo, después de desayunar, me volvió a pasar. Recuerdo una sensación

Agradecemos a nuestro amigo de Valladolid que haya querido compartir esta información con nuestros socios. Recomendamos a nuestros lectores que no se automediquen, y hagan como Pablo que toma el acamprosato previa prescripción de su médico. En la información publicada en Apat 38 se explicó que el acamprosato tiene efectos secundarios de escasa entidad, pero aún así hay que olvidarse de la automedicación.