Una nueva terapia que utiliza luces de colores para tratar el acúfeno

El anuncio de esta nueva terapia puede parecer una broma, pero no lo es, ya que en la Universidad de Leicester se está realizando un ensayo clínico que utiliza luces de colores para tratar el acúfeno. El interés de realizarlo se basa en un hecho fortuito: en un ensayo para el tratamiento de la migraña con luces de colores algunos pacientes que tenían migraña y acúfenos a la vez, explicaron una reducción en la percepción de la intensidad de sus acúfenos.

Esta mejora la observaron en el 40 % de los pacientes con migraña que además tenían acúfenos, e inmediatamente han iniciado un ensayo con un mayor número de pacientes con acúfenos. El ensayo consiste en someter a los pacientes a rayos de luz de distintos colores según un protocolo que no se ha publicado y después medir la percepción del acúfeno de los participantes mediante alguno de los test disponibles.

Tanto los investigadores como los clínicos están de acuerdo en que el acúfeno subjetivo crónico, que es el más frecuente, se genera en el cerebro. Debido a pérdida de audición relacionada con la edad, con una lesión o con un hecho traumático, el cerebro deja de recibir señales auditivas del oído y compensa esta carencia con la creación de un sonido (el acufeno) que no tiene una causa exterior que lo produzca.

Se dispone actualmente de algunos tratamientos, en particular los basados o derivados de la TRT Tinnitus Retraining Therapy que requieren el uso de generadores de sonido blanco. Tienen un coste elevado y un éxito variable, ya que depende del paciente, de la etiología de su acúfeno y de cómo se practique la terapia. Este nuevo enfoque se basa en la teoría de que los rayos de luces de colores pueden incidir en el área del cerebro que procesa los sonidos y compensar la carencia de estímulos sonoros que es la que genera los acúfenos.

En el Hospital Universitario de Leicester se ha iniciado un ensayo con 32 pacientes con acúfenos, en el que probarán una lámpara que emite luz de colores rojo, azul y verde – y cuya intensidad puede graduarse – y registrarán como perciben sus acúfenos los participantes. A partir de los datos que recojan podrán proponer un protocolo de actuación en pacientes con acúfenos mediante luces de colores.

Los que tenemos acúfenos debemos esperar a que se realice el estudio y se conozcan sus resultados. Si el porcentaje de éxitos es razonable los resultados del ensayo darán lugar a un protocolo de actuación en clínica, que es el que nos interesa que pongan en práctica nuestros facultativos.

Este nuevo enfoque nos gusta, ya que no es invasivo en absoluto y, por lo que parece, su aplicación tendrá un coste reducido. A ver si tenemos suerte y su aplicación clínica no se demora.

Más información en:
http://themissouriinjuryblog.com